lunes, 28 de julio de 2014

DECLARACIÓN DE AMOR Nº 71


Hoy me doy por vencido de lo que nunca pude cambiar, hoy dejo de lado la perseverancia característica en mí de pequeño, pero ante todo dejo de lado la perseverancia en ideas, ambiciones o sentimientos que son lo que son y ya no van a cambiar; dejo a la vida que siga por sí misma su curso hacia delante con toda tranquilidad, sin que yo tenga que hacer demasiado por condicionarla.... 

Hoy dejo de ser el buscador de cosas inexistentes, de gente que nunca estuvo ni estará, gente que siempre desaparece cuando menos te lo esperas, lugares que nunca volverán y es inútil ir allí, palabras que nunca se dirán por lo vano que resultan, sabores que no volverán porque ya se perdieron las ilusiones.

Hoy le digo si a quien soy y a la vida que tengo, a la gente que me busca, que me espera, que me escucha, que me quiere, que me aprecia, que me respeta, y que sabe entender cuando estoy mal. 

Desde hoy seré feliz con quien me mire a los ojos, con quien quiera reír conmigo, con quien quiera llorar conmigo, pero sin silencios incómodos o injustificados desencuentros. 

Hoy voy a mirar mi vida desde la ventana de los tesoros más valiosos, los amigos que están siempre que los necesito o que ellos me necesitan, la maravillosa familia que tengo, la gente buena y honesta que necesite mi ayuda y por sobre todo desde hoy estoy para mi mismo, para ser feliz, para disfrutar, para gritar, reír, bailar y seguir amando con todo mi ser a la mujer que amo. Hoy sólo estoy para la mujer de mi vida, para mi gente, y para mi mismo.


 Hoy, gracias a tu amor, he renacido de nuevo. Lo demás, vanidades e inutilidades, ya no me importan.  

miércoles, 16 de julio de 2014

DECLARACIÓN DE AMOR Nº 70



Cariño, a veces tu lenguaje tan raro ya no lo entiendo, tan plagado de dobles sentidos que no sé qué estás diciendo. Cuando hablas como un ser enamorado, comprendo lo que dices, y en mi corazón lo siento. Es más: me agrada mucho cuando me dices y me repites una y otra vez que me quieres. Tu lenguaje de poeta es más que brillante, a veces muy atrevido, que digas tonterías o marranadas tan propias de ti, nunca lo encontraré ni vulgar ni soez: es más, me fascina tu sentido del humor.

Me fijé que cuando hablas con las mujeres y de las mujeres, así te transformas,...eres todo un atleta del encanto, como un galán en plena forma, que a veces veo en ti a un poeta. Y cuando peleas contra alguien que no te cae bien, eres tan directo, que a veces hieres con tu desdén. No me extraña, eres personalidad tan fuerte, que a veces llegas a ser insoportable, pero igual a ti se te perdona todo, igual sabes ser tan atractivo, tan encantador, tan acaramelado..., no te cambiaría por nadie en el mundo.

A veces puedes ser muy cambiante, como si tuvieras muchos seres en uno, pero yo estoy tan enamorada de ti, que te amo como a ninguno. Claro que yo quisiera que fueras de un humor más constante, porque me gusta cómo me amas, pero también me asustas al enojarte. No, no quiero enojarte, no busco enojarte, por favor perdóname...es que a veces soy como tonta que ni sé bien qué estoy haciendo. Eso sí: sé que te amo,....sí, es verdad....

Cuando me dices tu amor, eres un ser tan tierno, que disfruto tanto de tu dulzura, que me haces sentir como en el cielo. Por favor, quédate ahí, en ese ser enamorado que me trata con tanto amor, como ese hombre en quien siempre yo había soñado. Eres mi sueño, y para nada ahora quiero despertarme, aunque sé que no estoy durmiendo. Por favor, no te enojes más conmigo, no te muestres ahora tan frío por mi estupidez,....sólo dame tu calor, que es tu amor lo que siempre deseo y ansío de ti. Te quiero (y mucho)....


miércoles, 2 de julio de 2014

DECLARACIÓN DE AMOR Nº 69



Eres el hombre de mi vida, que como salada agua del mar inundaste mi vida con todo tu amor, y la colmaste con un delicioso calor. Arrasaste con mis defensas que muy débiles eran, y me llevaste a tu paso todo lo que yo era. Después de que llenaste mi vida con tu cariño, con tu presencia, con tu compañia, una nueva mujer nació en mí. Surgió alguien que con tu ejemplo se sitió más fuerte, más segura, más confiada. Me sentí más mujer, gracias a ti.

Ahora te quiero tanto sin pensar en las consecuencias. Te quiero y te amo, y ya veremos cómo nos llega la cuenta. Como marea del mar, inundaste  hasta lo último que había en mi corazón, con tu empuje de agua cálida, terminaste con la vida vacía que llevaba antes de que tú aparecieras. Antes era como si la soledad me tuviera presa, pero tu fortaleza, tu inteligencia, tu decisión,...me liberaron, y hoy soy libre para amarte, para adorarte y para sentirte mío. Si nos juzgan y nos critican, ¿eso qué importa?, yo igual te voy a seguir amando a pesar de lo que digan los necios y las envidiosas, aunque nos arrase un vendaval.


Tú eres como el agua del mar que me reconforta y no me ha de faltar, que es todo lo que necesito de ti para ser feliz por una eternidad. Te quiero, mi amor, y gustosamente soy tuya.